La Importancia de Conocer Quién Eres y Hacer el Bien en la Vida

La Importancia de Conocer Quién Eres y Hacer el Bien en la Vida
Photo by Ryoji Iwata / Unsplash

En la vida, una de las preguntas más fundamentales que podemos hacernos es: ¿Quién soy?. Nuestra identidad define nuestras acciones, nuestras decisiones y nuestro propósito en este mundo. Como católicos, estamos llamados a encontrar nuestra verdadera identidad en Dios y a vivir conforme a Su voluntad.

Nuestra Identidad en Cristo

El mundo moderno nos ofrece muchas respuestas sobre quiénes somos: nuestra profesión, nuestra nacionalidad, nuestros talentos o nuestros logros. Sin embargo, la verdadera respuesta está en el Evangelio: somos hijos de Dios (1 Juan 3:1). Desde el bautismo, hemos sido llamados a vivir como discípulos de Cristo, a reflejar Su amor y a participar en Su misión de salvación.

Jesús mismo nos enseñó que nuestra identidad no depende de lo que poseemos o de lo que otros piensan de nosotros, sino de nuestra relación con el Padre. Cuando entendemos esto, nuestra vida toma un rumbo claro y encontramos un propósito más profundo: amar a Dios y al prójimo.

Hacer el Bien Porque Es lo Correcto


En un mundo donde muchas personas actúan movidas por intereses personales o recompensas externas, los cristianos estamos llamados a hacer el bien simplemente porque es lo correcto. En Mateo 5:16, Jesús nos dice:

“Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.”

Esto significa que nuestras acciones deben ser un reflejo de nuestra Fe, no porque esperemos reconocimiento, sino porque deseamos vivir en la verdad y el amor de Dios. La virtud y la bondad no dependen de si alguien nos está mirando o si recibimos un beneficio a cambio; hacemos el bien porque Dios nos ha llamado a ser luz en el mundo.

El Ejemplo de los Santos

Los santos son grandes modelos de cómo vivir nuestra identidad cristiana. San Francisco de Asís renunció a su riqueza porque entendió que su verdadera identidad estaba en Cristo, no en las posesiones materiales. Santa Teresa de Calcuta dedicó su vida a los más pobres, no buscando reconocimiento, sino porque veía en cada persona el rostro de Cristo.

Sus vidas nos enseñan que cuando vivimos con autenticidad nuestra fe y hacemos el bien sin esperar nada a cambio, encontramos una paz y una alegría que el mundo no puede dar.

Viviendo plenamente

Conocer quiénes somos en Dios y vivir conforme a esa identidad es clave para una vida plena y significativa. No estamos en este mundo por casualidad; hemos sido creados por amor y para amar. Hacer el bien sin buscar recompensa es la esencia de la vida cristiana y nos acerca cada vez más a la santidad.

Cada día es una oportunidad para reafirmar nuestra identidad en Cristo y para actuar con amor y justicia. Sigamos el llamado de Jesús y vivamos con la certeza de que, al hacer el bien, estamos reflejando la luz de Dios en el mundo.

Dios te bendiga, y nos vemos en el camino